¿Qué son las lipoproteínas?
Las lipoproteínas son complejos súper inteligentes que resuelven un problema básico: las grasas no se pueden disolver en agua (como aceite y agua), pero tu sangre es principalmente agua. Estas partículas actúan como pequeños contenedores que mantienen las grasas organizadas y transportables.
Cada lipoproteína tiene una estructura genial: un núcleo hidrofóbico (que repele el agua) lleno de triglicéridos y ésteres de colesterol, rodeado de una capa hidrofílica (que atrae el agua) hecha de fosfolípidos, colesterol libre y proteínas llamadas apolipoproteínas.
Las lipoproteínas se clasifican según su densidad, desde las más ligeras hasta las más pesadas: quilomicrones, VLDL, LDL y HDL. Cada tipo tiene un trabajo específico en tu cuerpo.
¡Dato curioso! Las apolipoproteínas no solo estabilizan estas partículas, sino que también funcionan como "llaves" que abren receptores específicos en tus células.