Enlaces Iónico y Metálico
El enlace iónico es totalmente diferente al covalente: aquí no hay compartir, sino que un átomo le regala electrones a otro. Imagínate que es como cuando alguien te da dinero y tú quedas "en deuda" con esa persona.
Esto pasa típicamente entre un metal y un no metal. El metal cede electrones y se vuelve positivo, mientras que el no metal los recibe y se vuelve negativo. Como cargas opuestas se atraen, quedan pegaditos por la atracción electrostática.
Los compuestos iónicos tienen características súper útiles: altos puntos de fusión, se disuelven en agua y conducen electricidad cuando están disueltos.
El enlace metálico es el más "relajado" de todos. Los átomos de metal forman una especie de red donde los electrones andan libres como en una fiesta, moviéndose entre todos los átomos. Por eso los metales son buenos conductores y puedes martillarlos sin que se rompan.
💡 Recuerda: Covalente = comparten, Iónico = transfieren, Metálico = electrones libres