Tipos de Colágeno y Fibras
El colágeno es literalmente la proteína más abundante de tu cuerpo y viene en varios tipos súper especializados. El tipo I es el todoterreno que resiste tensión en dermis, tendones y huesos. El tipo II es el especialista en cartílagos que resiste presión, mientras que el tipo III forma redes estructurales en órganos como hígado y bazo.
Cada tipo tiene su zona de trabajo específica: el tipo IV forma la lámina basal para soporte y filtración, el tipo VII pega la epidermis con la dermis, y así sucesivamente hasta el tipo XXI que mantiene la arquitectura 3D de los tejidos conectivos.
Las fibras elásticas contienen elastina que le da esa capacidad de estirarse y regresar a su forma original, como una liga súper sofisticada. Las fibras reticulares crean pliegues y estructuras más delicadas.
Para que todo este sistema no se desparrame como confeti, existen glucoproteínas de adhesión como fibronectina y laminina que actúan como pegamento inteligente, manteniendo la matriz extracelular organizada y funcional.
Truco mnemotécnico: Tipo I = tensión, Tipo II = presión. ¡Así de simple!