Organización del Gobierno Mexicano
El derecho administrativo básicamente establece las reglas del juego entre el gobierno y tú. Define cómo están organizadas todas las instituciones públicas y cómo deben tratarte cuando necesitas algún trámite o servicio.
El gobierno mexicano se divide en cuatro tipos principales de administración pública. Cada uno tiene diferentes niveles de independencia y funciones específicas, pero todos trabajan bajo las mismas reglas básicas del derecho administrativo.
La administración centralizada es como el "cerebro" del gobierno. Aquí todas las decisiones importantes se toman desde el centro, como en las secretarías principales: SEGEGO, SEFIN, y las secretarías de Seguridad, Economía y Educación. Todo está conectado bajo una sola línea de mando.
💡 Dato clave: Cuando haces un trámite en cualquier dependencia gubernamental, el derecho administrativo es lo que protege tus derechos y establece los procedimientos que deben seguir.
Por otro lado, tenés la administración descentralizada, que son organismos con más libertad para tomar sus propias decisiones. Ejemplos incluyen el Instituto Mexicano de la Radio (IMER), la Casa de Moneda de México, y el ISSFAM para las fuerzas armadas.
La administración desconcentrada es un punto medio: tienen cierta autonomía pero siguen reportando a una autoridad superior. Un ejemplo es la Agencia de Protección Sanitaria de CDMX o el famoso C5.
Finalmente, la administración paraestatal incluye organismos como PROFECO, el SGM, e IMPI. Estos tienen la mayor autonomía y muchas veces manejan sus propios presupuestos, pero siguen siendo parte del sector público y colaboran con los objetivos gubernamentales.