Clasificación de las Empresas
Clasificar empresas es súper útil porque te permite entender rápidamente sus características principales. Imagínate que es como organizar tu música por género: cada categoría tiene sus propias reglas y patrones.
Por tamaño es una de las clasificaciones más importantes que debes dominar. Las microempresas tienen menos de 10 empleados (piensa en la tiendita de la esquina), las pequeñas empresas manejan entre 10 y 50 personas, las medianas empresas van de 50 a 250 empleados, y las grandes empresas superan los 250 trabajadores.
Por ámbito territorial, las empresas pueden ser locales, regionales, nacionales o internacionales. Esta clasificación te dice exactamente dónde operan y cuál es su alcance geográfico.
💡 Tip clave: El tamaño de una empresa determina muchas cosas: desde sus obligaciones fiscales hasta las estrategias que puede usar.
Por actividad económica se dividen en tres grandes grupos. Las industriales se dedican a producir cosas, las comerciales compran y venden productos, y las de servicios ofrecen experiencias o soluciones (como Netflix o tu peluquería favorita).
Por finalidad es súper directo: están las empresas con fines de lucro que buscan maximizar ganancias, y las sin fines de lucro que tienen objetivos sociales o benéficos.
Por origen del capital distingue entre públicas (el gobierno pone el dinero) y privadas (inversionistas particulares aportan el capital). Por forma jurídica incluye empresario individual, sociedades anónimas (SA) y sociedades de responsabilidad limitada (SRL), cada una con reglas legales diferentes.