Absorción, Almacenamiento y Reflejos Adicionales
El colon es un maestro de la absorción de agua: transforma el contenido de semi-líquido a semi-sólido, y finalmente a sólido. La motilidad excesiva reduce la absorción y causa diarrea, mientras que la poca motilidad aumenta demasiado la absorción y produce estreñimiento.
El recto normalmente está vacío gracias a un esfínter funcional débil a 20 cm del ano y un ángulo agudo que proporciona resistencia adicional. Solo cuando un movimiento de masa fuerza las heces hacia el recto aparece el deseo de defecar.
Durante la defecación, tu cuerpo coordina múltiples acciones: inspiración profunda, cierre de la glotis, contracción de músculos abdominales, descenso del suelo pélvico, y relajación del anillo anal. Es un proceso complejo que requiere coordinación perfecta.
Existen otros reflejos autónomos importantes: el reflejo peritoneointestinal (la irritación del peritoneo paraliza el intestino), el nefrointestinal (irritación renal inhibe actividad intestinal), y el vesicointestinal (irritación vesical hace lo mismo).
Conexión clínica: En peritonitis, el reflejo peritoneointestinal puede causar parálisis intestinal completa, mientras que en apendicitis, la irritación puede provocar espasmo del esfínter ileocecal.
Estos reflejos demuestran cómo tu abdomen funciona como una unidad integrada, donde la irritación en un órgano puede afectar todo el sistema digestivo.