Las Capas de la Tierra: Un Sistema Interconectado
Imagínate la Tierra como una cebolla gigante con múltiples capas que interactúan constantemente. Cada una tiene un trabajo específico, pero todas dependen unas de otras para mantener la vida en nuestro planeta.
La litósfera es tu hogar directo - es esa superficie sólida donde caminas todos los días. Con un grosor de 50-200 km, está hecha de rocas ígneas, metamórficas y sedimentarias que forman el suelo bajo tus pies.
La hidrósfera cubre el 71% de la superficie terrestre y incluye todos los océanos, ríos, lagos y hasta el agua subterránea. Sin ella, no habría lluvia ni vida como la conocemos.
La atmósfera es tu escudo protector invisible que se extiende 10,000 km hacia el espacio. Está compuesta principalmente por nitrógeno y oxígeno, y tiene cinco capas distintas que protegen la Tierra de meteoritos y radiación.
💡 Dato clave: La geosfera incluye todas las partes sólidas de la Tierra, desde la corteza hasta el núcleo interno, y es la base que sostiene a todas las demás esferas.
Los procesos geológicos nunca se detienen. La tectónica de placas mueve lentamente la litósfera, creando montañas y volcanes. Mientras tanto, la erosión y sedimentación constantemente remodelan la superficie, y la actividad volcánica puede crear nuevos paisajes de la noche a la mañana.
Estos sistemas trabajan en perfecta sincronía a través del ciclo del agua. El agua se evapora de los océanos, forma nubes en la atmósfera, cae como lluvia sobre la litósfera, y regresa al mar. Este proceso regula el clima y hace posible que tengamos agua potable.