Efectos del pH en la Vida Acuática
Los ecosistemas acuáticos son como Ricitos de Oro - necesitan que el pH esté "justo en el punto correcto" para que la vida prospere. Un pequeño cambio puede ser la diferencia entre un lago lleno de vida y uno completamente muerto.
Con pH entre 3.5-4.0, los salmones mueren al contacto. Entre 4.0-5.0, la mayoría de peces, ranas e insectos no pueden sobrevivir, y los huevos de pez ni siquiera pueden eclosionar. Aquí es donde la cosa se pone realmente fea: las bacterias descomponedoras mueren, los nutrientes se acumulan como basura sin procesar, y metales tóxicos como aluminio y plomo se liberan en el agua.
El rango óptimo es 6.5-8.2 - aquí la mayoría de organismos acuáticos viven felices. Pero si el pH sube a 9.0-10.5, los salmones y perchas empiezan a sufrir. Cualquier cosa por encima de 11.0 mata rápidamente a todas las especies de peces.
Conexión real: La lluvia ácida causada por contaminación industrial puede bajar el pH de lagos y ríos, creando estos efectos devastadores en la vida acuática.