Cuando la Retroalimentación Positiva se Vuelve Problemática
Los impulsos nerviosos muestran cómo la retroalimentación positiva funciona normalmente. El potencial eléctrico sube rápidamente (despolarización), alcanza un pico, y luego baja (repolarización) antes de entrar en un periodo refractario.
Durante el parto, la retroalimentación positiva es esencial. La oxitocina viaja por el torrente sanguíneo hacia el útero, estimula contracciones que empujan al bebé hacia el cuello uterino, creando más presión y más oxitocina.
Sin embargo, la retroalimentación positiva también puede causar problemas. En inflamaciones excesivas, las citocinas proinflamatorias se potencian a sí mismas, creando un ciclo dañino que vemos en enfermedades autoinmunes.
Los neutrófilos (glóbulos blancos) pueden activarse de manera descontrolada, causando más daño que beneficio cuando la respuesta se amplifica demasiado.
Clave: La retroalimentación positiva es como el fuego - útil cuando está controlada, destructiva cuando se sale de control.