Ley de los signos
La suma y resta son las operaciones más sencillas para empezar. Cuando sumas dos números positivos, obviamente obtienes un resultado positivo. Si sumas dos números negativos, el resultado también es negativo porque estás "sumando deudas".
Pero aquí viene lo interesante: cuando tienes signos diferentes (un positivo y un negativo), entonces restas los números y te quedas con el signo del número mayor. Por ejemplo, si tienes +8 + (-3), realmente estás haciendo 8 - 3 = 5, y como 8 es mayor, el resultado es positivo.
En multiplicación y división las reglas son idénticas y súper fáciles de recordar. Cuando multiplicas o divides números con el mismo signo (ambos positivos o ambos negativos), el resultado siempre es positivo.
Cuando multiplicas o divides números con signos diferentes (uno positivo y uno negativo), el resultado siempre es negativo. ¡Es así de simple! Por ejemplo: 4 × (-2) = -8, pero (-4) × (-2) = +8.
Tip clave: En multiplicación y división, signos iguales = resultado positivo, signos diferentes = resultado negativo.