¿Qué son los Ángulos?
Imagínate que tomas dos palitos y los unes por un extremo: ¡acabas de crear un ángulo! Un ángulo es exactamente eso: la porción de espacio que se forma entre dos semirrectas (como rayos de luz) que salen del mismo punto llamado vértice.
El ejemplo perfecto lo tienes en tu casa: las agujas del reloj. Ambas agujas se conectan en el centro (ese es el vértice), y conforme pasa el tiempo, se van separando y creando diferentes aberturas o ángulos.
Los grados son la unidad que usamos para medir qué tan "abierto" está un ángulo. Mientras más se separen las líneas, mayor será el número de grados. Para medirlos usamos el transportador, una herramienta semicircular súper útil.
¡Dato curioso! Los grados se escriben con el símbolo °, así que 90 grados se ve como 90°. ¡Es como darle su propia "firma" a cada ángulo!
Tipos de Ángulos Según Su Abertura
No todos los ángulos son iguales, y según qué tan abiertos estén, tienen nombres específicos. Conocer estos tipos te hará ver ángulos en todas partes: en tu cuarto, en los edificios, ¡hasta en las rebanadas de pizza!
Los ángulos agudos son pequeñitos (menos de 90°), como la punta de un lápiz. Los ángulos rectos miden exactamente 90° y los ves en las esquinas de tu cuaderno. Los ángulos obtusos son más grandes (entre 90° y 180°), como cuando abres un libro.
También existen los ángulos llanos (180°, como una línea recta), los oblicuos (cualquiera que no sea recto) y el ángulo perigonal (360°, ¡una vuelta completa como cuando giras en tu lugar!).
Tip de estudio: Piensa en las manecillas del reloj para recordar: a las 3:00 forman un ángulo recto, a las 6:00 un ángulo llano.