Transformaciones Económicas, Culturales y Conflictos Religiosos
La economía española vivió un boom durante este período. Se crearon sociedades económicas para impulsar la agricultura, el comercio y la ciencia. España compitió fuertemente contra Inglaterra en la Guerra de la Oreja de Jenkins, fortaleciendo su presencia comercial en América.
Las expediciones científicas exploraron la flora y fauna americana, mientras que el libre comercio entre puertos y el fortalecimiento de la industria textil catalana impulsaron la economía nacional. Todo esto formaba parte de la estrategia ilustrada de modernización.
Uno de los conflictos más importantes fue la expulsión de los jesuitas, acusados de defender ideas contra los reyes y de generar problemas en las escuelas que controlaban. Las órdenes religiosas ortodoxas como los dominicos también entraron en tensión con la monarquía.
El arte y la cultura se transformaron radicalmente. La música se usaba incluso como medicina - Felipe V combatía su depresión escuchando al cantante italiano Farinelli. La arquitectura mezcló estilos barroco tardío, rococó y neoclásico, mientras que Boccherini introdujo el fandango en la música de la corte.
Realidad del cambio: Aunque España se modernizó significativamente, la desigualdad social y los conflictos con la iglesia persistieron durante todo el siglo XVIII.