El trato con el diablo
En un pasado lejano, un minero llamado Juan, hombre ambicioso y descontento con su vida, expresó en una cantina que daría lo que fuera por ser rico. En ese momento, un charro alto vestido de negro entró y le ofreció hacer realidad su deseo, causando que los presentes se persignaran asustados.
Siguiendo las instrucciones del misterioso ser, Juan fue a una mina abandonada donde encontró una víbora gigante que decidió llevarse a su casa. La depositó en un pozo seco y esa noche soñó con ella. En el sueño, la serpiente le agradecía por darle su hogar y le ofrecía un pago a cambio de su alma y su hijo varón.
A la mañana siguiente, Juan descubrió bolsas de oro en su granero, pero también encontró a su bebé de seis meses despedazado en el pozo donde había dejado a la serpiente. A pesar de esta terrible pérdida, el dinero le sirvió de consuelo y se hizo de terrenos y una hacienda.
⚠️ ¡Ojo con esto! La leyenda nos advierte sobre el peligro de la ambición desmedida y cómo la codicia puede llevarnos a sacrificar lo que realmente importa.