Procedimiento Paso a Paso
Tu técnica debe seguir un orden específico: siempre de lo más limpio a lo más sucio. Comienza lavando párpados sin jabón, luego cara, orejas y cuello. Continúa con brazos usando movimientos largos y ascendentes para estimular la circulación.
Para el torso, coloca una toalla protectora antes de lavar pecho y abdomen. Cambia el agua antes de las piernas - esto previene infecciones y mantiene la higiene adecuada.
La espalda requiere que ayudes al paciente a acostarse de lado. Aquí puedes dar un masaje suave que estimule la circulación. Para la región púbica, siempre usa guantes y permite que el paciente se asee solo si puede hacerlo.
Termina ayudando con el camisón, acomodando la ropa de cama y documentando todo en las notas de enfermería: hora, fecha, problemas detectados y estado de la piel.
💡 Recuerda: Los movimientos largos y ascendentes en brazos y piernas mejoran el flujo venoso y la circulación del paciente.