El Drama de los Baobabs
Cada día el narrador aprende algo nuevo sobre el planeta del principito. El tercer día descubre el drama de los baobabs cuando el principito pregunta si los corderos comen arbustos.
Los baobabs son árboles gigantescos que, cuando son pequeños, parecen inofensivos. Pero si no se arrancan a tiempo, sus raíces pueden cubrir y hasta hacer estallar un planeta pequeño.
"Es una cuestión de disciplina", explica el principito. Cada mañana, después de arreglarse, hay que limpiar cuidadosamente el planeta y arrancar los baobabs jóvenes antes de que crezcan demasiado.
El principito conoció un planeta habitado por un perezoso que descuidó tres arbustos de baobab. Las consecuencias fueron catastróficas. Por eso es tan importante el cordero: puede ayudar comiendo las plantas peligrosas cuando están pequeñas.
El narrador, animado por un sentimiento de urgencia, dibuja los baobabs para advertir a los niños sobre estos peligros. A veces no hay problema en postponer el trabajo, pero con los baobabs, el retraso siempre es una catástrofe.
Alegoría importante: Los baobabs representan los problemas que debemos enfrentar antes de que crezcan y se vuelvan inmanejables.