Por qué obsesionarse con las calorías es contraproducente
Contar calorías obsesivamente crea un ciclo negativo de restricción, culpa, ansiedad y atracones que afecta gravemente tu salud mental. Este enfoque restrictivo interfiere con tu intuición corporal e impide que escuches las señales naturales de hambre y saciedad.
En cambio, centrarte en porciones adecuadas y visualmente equilibradas, como el método del plato dividido, promueve una relación más armoniosa con la comida. Te permite disfrutar sin culpa y fomenta una conexión más profunda con tu cuerpo.
Esta estrategia es más compasiva, efectiva y menos estresante que obsesionarse con números. Permite flexibilizar tu alimentación según tu apetito y necesidades individuales, priorizando tu bienestar físico y psicológico a largo plazo.
¡Importante! Una buena alimentación se trata de salud integral, no de números en la balanza.