La Tabla Periódica: Tu Mapa Químico
Imagínate tener un catálogo súper organizado de todos los elementos que existen en el universo. Eso es exactamente lo que es la tabla periódica: una herramienta que agrupa 118 elementos según sus propiedades y características.
Cada casillita en la tabla te da información clave sobre un elemento. Verás el número atómico (que te dice cuántos protones tiene), el símbolo químico (como H para hidrógeno), el nombre del elemento y su masa atómica. Esta información es como el DNI de cada elemento.
Los elementos se clasifican en tres grandes grupos que puedes identificar fácilmente: metales (M), no metales (Nm) y metaloides (Md). Los metales brillan y conducen electricidad, los no metales son más diversos (como el oxígeno que respiras), y los metaloides tienen propiedades de ambos.
¡Dato curioso! Los elementos marcados como bioelementos primarios (Bop) y secundarios (Bos) son los que forman tu cuerpo. ¡Literalmente estás hecho de elementos de la tabla periódica!
Las familias o grupos verticales agrupan elementos con comportamientos similares. Por ejemplo, los metales alcalinos (como el sodio) son súper reactivos, mientras que los gases nobles (como el neón) casi no reaccionan con nada.