El Ciclo del Agua: Un Proceso Que Nunca Se Detiene
El agua de tu planeta está en constante movimiento, pasando por diferentes estados y lugares en un proceso increíble. Todo comienza cuando el sol calienta los océanos, ríos y lagos, transformando el agua líquida en vapor mediante la evaporación.
Mientras tanto, las plantas también participan activamente liberando vapor de agua a través de la transpiración - es como si estuvieran "sudando" para ayudar al ciclo. Este vapor asciende hacia la atmósfera donde algo fascinante sucede.
Al enfriarse en las alturas, el vapor se convierte nuevamente en gotitas de agua mediante la condensación, formando las nubes que ves cada día. Cuando estas nubes se llenan completamente de agua, ocurre la precipitación - lluvia, nieve o granizo caen hacia la superficie.
El agua que llega al suelo tiene dos destinos principales: parte se infiltra en la tierra recargando los acuíferos subterráneos, y otra parte forma la escorrentía que fluye por la superficie regresando a ríos y lagos para reiniciar todo el proceso.
¿Sabías que? El mismo ciclo del agua ha estado funcionando durante millones de años, lo que significa que el agua que bebes hoy es la misma que bebían los dinosaurios.